¿Por qué estoy siempre enfadada?

Hay personas que parecen que están casi siempre enfadadas, que van de enfado en enfado, que casi todo les sienta mal, que casi todo les molesta, que tienen una única mala cara para recibir la distintas cosas del día a día.

Quienes observamos a estos seres iracundos, vemos que lo pasan mal, que esa casi perpetua actitud de enfado les dificulta las relaciones con los demás y hace que su vida no fluya, esté llena de obstáculos y eso: les genera sufrimiento. Van por la vida enfadados y sufriendo. Y me pregunto: ¿qué les ha pasado? ¿Qué pasa por su cabeza y su corazón que los enfada tanto?

Antes de hablar de las posibles razones de esos enfados, me gustaría nombrar las distintas conductas relacionadas con el enfado:

- Malas caras y malas miradas.

- Levantar la voz, gritar.

- Tratar con indiferencia y/o desdén a los otros.

- Ser bruscos.

- Dar golpes a las cosas.

- Insultar.

- Ser irónico, sarcástico o burlón.

Posibles razones a los enfados recurrentes

- Han tenido padres enfadones, gruñones que han sido el modelo que han copiado. Los padres son grandes modeladores de conductas al ser nuestros referentes ”Mientras más gruñón soy, más cerca de mis padres estoy” (mensaje totalmente inconsciente).

- Son perfeccionistas, muy exigentes y buscan la perfección en todo lo que hacen y esperan o exigen lo mismo de los demás. Si son ellos los que no alcanzan ese estándar tan elevado que tienen, se enfadan con ellos mismos. Si son los demás, éstos serán calificados de inútiles y chapuceros y se enfadarán por estar rodeados de ineptos. ¿Por qué y para qué esa exigencia de perfección? ¿Qué hay detrás?

- Tienen una sensación de frustración permanente que genera una especie de resentimiento o acritud general. No saben gestionar esta frustración, no se han puesto a analizarla, sólo reaccionan ante lo que la causa.

- Callan, callan y luego explotan. Son personas que van recibiendo lo que no les gusta en silencio. Van reprimiendo, van llenando la jarra hasta que al final se desborda y explotan. Porque cuando ese enfado sale, es explosivo por toda la presión interna generada.

- Hay un grupo de iracundos que sólo lo son en pareja. Qué curioso, ¿verdad? Sienten y manifiestan su enfado solo dentro de la pareja y fuera de este ámbito no suelen enfadarse. Parece que para estas personas la ecuación inconsciente sería: pareja= enfado=discusión. ¿Por qué será? En la base de esto seguramente encontraremos otra vez, unos padres que discutían mucho entre ellos. Han asociado de manera no consciente las palabras pareja y enfado. “Mientras más me enfado con mi pareja, más me identifico con mis padres o más cerca de ellos estoy”.

Otras explicaciones a los enfados (más particulares y que he visto en consulta)

- Adultos que cuando eran niños, ya iban rodeados de una especie de nube negra de enfado y que llamaban la atención por eso, por ser niños malhumorados, enfadados con la vida sin motivo aparente. En estos casos para mí es obvio que ese enfado no les pertenece ¿Qué quiero decir con esto? Que algo ha pasado con sus padres o familia en el momento de la gestación y/o primeros años de su vida, y este niño lo ha absorbido cual esponja emocional. ¿Podría ser un enfado que sus padres no se permitieron manifestar? ¿Podría ser que sucedió un acontecimiento doloroso e injusto que dejó la semilla del enfado y la injusticia en el pequeño?

- Cuando alguien o algo muere (como una relación, por ejemplo) la persona que sufre la pérdida pasará por un proceso de duelo. Este duelo tiene varias etapas y una de ellas es el enfado. A veces el duelo se bloquea en una de estas etapas y la persona queda encallada allí. ¿Qué pasaría si se quedara bloqueada en el enfado? Pues que se enfrentaría a su día a día viviéndolo desde el enfado. ¿Qué pasaría si una madre estuviera embarazada o amamantando o criando a un pequeñín? Pues que ese pequeño ser sería también alimentado con moléculas de enfado, y luego experimentaría ese enfado como propio cuando en realidad, no lo es. Interesante ¿verdad?

Como veis, hay explicaciones variopintas, unas más fáciles de comprender que otras, unas más evidentes que otras. Lo que he expuesto es lo que suelo ver en consulta. Y veo a estos seres enfadados sufrir mucho y con ellos, las personas que los rodean, sobre todo la familia. Por eso, si eres uno de ellos o tienes un familiar o amigo cercano que vaya por la vida sumido en un enorme enfado y padeciendo sus consecuencias, háblale de mí. Yo puedo ayudarlo. Juntos podemos encontrar el origen, desactivarlo y aprender estrategias para ver la vida con otras gafas que no sean las del enfado.

Aquí estaré tranquila esperando.

Buena vida.

Vero.